Está claro que hace falta magia para solucionar el problema de cruzar la vías por el paso de Larrañaga y quien sinó mejor para hacer magia que el mismísimo Harry Potter. Esta es la estación de Hogwarts (en realidad es el pueblo de Goathland), ese sitio donde está la Escuela de Magia y que sencilla es la solución y cuantas vidas se habrían salvado.
Pero ya saben que la alcaldesa "esa que no puede ser nombrada" prefiere pasarse los años divagando y por supuesto evitando que nada le tape la foto a su querido (e investigado) Niemeyer.
Pues ya ven, los británicos vienen haciendo esto desde que construyeron sus primeros ferrocarriles y los pueblos ingleses a los que casi todos llega el tren tienen esta "ingeniosa solución arquitectónica" para evitar pasar por la vía.