miércoles, 13 de abril de 2016

Una reforma legal a fondo puede ser una estrategia ganadora en las próximas elecciones generales


Una profunda renovación del sistema legal español puede, para sorpresa de muchos, ganar unas elecciones generales. Algo que deberían considerar los candidatos ante lo que parece inevitable, unas nuevas elecciones generales.

La gente de la calle no es tan tonta ni tan conformista como uno cree, confieso que yo a veces pierdo la esperanza pero hay vida más allá del populismo. El sistema legal español y concretamente sus leyes sencillamente apesta.

Inquilinos que no pagan y contra los que no se puede hacer nada sin invertir una pequeña fortuna en juicios, reyertas de bandas en Oviedo con secuestro de una menor por el medio y que verán como acaban todos impunes (creo recordar que algunos estados de EEUU el secuestro de una menor se condena con cadena perpetua no negociable), desfalcos, robos y demás corrupción donde básicamente no pasa nada ni se devuelve el dinero ni nada, cientos de aforados intocables, terroristas con delitos de sangre en libertad en pocos años (algunos desempeñando cargos públicos) y una de las que más me duelen, prescripción del asesinato a los 15 años. O sea, que si consigues escabullirte 15 años ya no importa el muerto. Para su información hay delitos económicos que no prescriben, si, como lo oyen. Y condenas por piratería de películas más altas que por tráfico de seres humanos o por pederastia.

Este panorama unido al mal funcionamiento del sistema judicial en sí y la corrupción manifiesta que sufre, no olvidemos las filtraciones de los secretos de sumarios, la desaparición de expedientes clave, el borrado de datos de investigaciones y demás que sólo pueden hacerse desde dentro por sus características, no dejan indiferentes a los ciudadanos sabedores de que poco pueden confiar a nuestro sistema judicial por miedo a salir de él ajusticiados en lugar de con justicia.

Cierto que para cambiar algunas de estas cosas habría que modificar la Constitución ¿y qué más da digo yo? Otros llevan años queriendo cambiarla por intereses personales y políticos, la Constitución no es inamovible, las cosas siempre se pueden mejorar, la clave está en hacerlo con la voluntad y visión adecuada.

Un partido con auténtica voluntad de servicio ciudadano pensaría en una reforma profunda del sistema y de unas leyes desfasadas e inoperantes. Se sorprenderían de lo receptivos que serían muchos ciudadanos.

Mucho pedir me temo.

martes, 5 de abril de 2016

Papeles que desaparecen en los juzgados

Uno de los mejores indicadores de la salud de una organización es la lealtad de sus componentes. Muchas empresas tienen empleados leales y muchas tienen clientes incondicionales, cuantos más, mejor la salud de la organización por regla general.

La situación contraria, cuantos más detractores peor, y el peor de todos es aquel que trabaja desde dentro en contra de la propia organización. La desaparición de papeles importantes del caso Marea no es más que otro episodio de un sistema de justicia en el que no cree nadie. Esta no es la primera vez que se borra contenido de ordenadores, que se producen filtraciones de secretos de sumario o que sencillamente se roba la evidencia.

Doy por sentado que los juzgados no tienen su puerta abierta de par en par 24 horas al día sin ningún tipo de vigilancia. Así que la conclusión más lógica es que estas cosas se hacen desde dentro y eso es un síntoma muy malo.

Un síntoma de la corrupción física y ética que impregna al sistema de justicia español, que voy a recordar es uno de los pilares de la separación de poderes. A esto unimos unas leyes ineficientes, irreales y anticuadas que casi perjudican más que protegen al ciudadano.

Empiezo a preguntarme seriamente si España está peor que Venezuela y se está convirtiendo también en un estado fallido.